jueves, 25 de julio de 2013

Comunicado sobre el accidente ferroviario de Santiago de Compostela

La solidaridad no tiene fronteras y nosotros sentimos las cosas buenas y las cosas malas que suceden a nuestros semejantes. Como sentimos el dolor de las personas que han perdido a sus familiares y amigos en el accidente sucedido ayer tarde en Santiago de Compostela.
 
Es muy difícil buscar palabras de aliento para estas familias, verdaderamente muy difícil, pero es necesario que, en el dolor distante que también sentimos nosotros, no nos ahogue y cumplamos el sagrado deber de transmitir nuestro amor a estas personas.
 
Cuando esta noche la luna llena ilumine los cielos, seguro que esta luz también iluminará la ciudad de Santiago de Compostela, campo de estrellas y lunas que esta noche brillaran más sobre el espíritu de las mujeres y hombres que sufren la ausencia de sus familiares desaparecidos y la de los malheridos que se recuperan en los hospitales.
 
Nosotros también sufrimos y deseamos la esperanza y el consuelo para vosotros.